Actividad efectuada el 6 de Noviembre con Ramon.
Pese a que la previsión da frio y viento, al final decidimos ir a esta zona, que yo solo había estado una vez hace unos años, en un intento a la via del Alicorn, que acabó en fracaso.
Cuando llegamos al parking del Coll Roig el termómetro del coche marca 6 ºC y alternan claros soleados con gruesas nubes de paso impulsadas por fuertes vientos en altura, que sin embargo donde estamos no se hacen notar demasiado.
Así que vamos a escalar, bien abrigados y confiando en que podremos hacer actividad.
La via elegida a propuesta de Ramón, es la Malalts de Roca, pese a que hace pocos meses él ya la había escalado, le gustó tanto que no le importó repetirla, y de paso me hizo a mi el favor, ya que yo no la había escalado.
La aproximación es corta y rápida y en 15 minutos estamos a pie de vía.
Sigue medio tapado, pero la roca no esta muy fría, a ratos el fuerte viento de NW en altura transporta algunos copos de nieve que debían de estar cayendo en las vecinas montañas del Pirineo.
La roca es una caliza excelente de gran adherencia y muy erosionada con agujeros, buzones, acanaladuras a veces cortantes...etc.
El equipamiento restaurado hace unos meses, es excelente a base de anclajes cimentados que están bien situados.
Hay bastante información en la red con buen detallaje de cada uno de los largos. No obstante la via no tiene pérdida, basta seguir la linea de seguros.
Comentar que en el segundo largo, hay que hacer un cambio de reunión, unos metros a la izquierda para buscar la placa con acanaladuras del tercer largo, al pie de la cual hay otra instalación.
Y lo mismo ocurre al final del cuarto largo, que hay que subir caminando por en corto sendero entre el boj para ir a buscar el inicio de la quinta y última tirada, hacia la izquierda.
Ningún largo tiene desperdicio, pero el tercero es francamente bonito.
La dificultad se mueve entre el IV/V, pero hay un último paso al final del quinto largo, antes de hacer cima, que puede ser V+, si bien no es muy obligado.
Con unas 12/14 bagas exprés pasaremos. Nosotros llevábamos un discreto juego de friends, y los sacamos a pasear.....
El descenso también es sencillo. Se hace un corto rápel de unos 25 m escasos, de cualquiera de las dos reuniones que hay a la salida de la via, a buscar la canal que hay debajo del último largo. Desde ahí solo queda seguir caminado la senda de descenso en la que encontraremos algún cable y algún escalón metálico, hasta llegar al camino de aproximación.
Escalada en todo momento amable y disfrutona, recomendable del todo.
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| En el primer largo |
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| En el primer largo |
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| En el primer largo |
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| En el primer largo |
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| Iniciando el segundo largo, roca excelente y cantos de escándalo.... |
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| En el segundo largo |
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| Llegando a la segunda reunión |
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| En el segundo largo |
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| En el segundo largo |
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| En la acanaladuras del tercer largo |
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| Al final de las acanaladuras. Largo excelente. |
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| En el tercer largo |
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| En el tercer largo |
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| En el magnífico diedro del cuarto largo |
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| Largo atlético |
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| Saliendo del cuarto largo |
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| Iniciando el quinto largo |
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| Debajo de la fisura de salida a cima, del quinto largo. Seguramente el tramo más difícil de la via, pero bien protegido. |
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| En la fisura |
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| Tramo en oposición cerca ya de la última reunión. |
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| En el quinto largo |
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| En el quinto largo |
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| En el quinto largo |
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| En el tramo difícil del quinto largo |
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| Lugar precioso con grandes vistas hacia el Ripollés y las montañas del Berguedá, al fondo el macizo de la Gallina Pelada en el centro y a la derecha la inconfundible imagen del Pedraforca. |
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| El Ripollés. En esta época del año las montañas se visten de gala con sus mejores colores. |
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| Magnifica reseña, como siempre, de Joan Asin, perfectamente detallada y con el grado adecuado. |
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