Actividad efectuada con Ramón y Jaume F. el 26 de Junio
Por fin después de mas de tres meses sin escalar, entre el confinamiento y las desescalada, podemos gozar plenamente de aquello que nos gusta: La montaña en todas sus facetas, en este caso escalar!
Como era la primera escalada dentro de la "nueva normalidad", decidimos ir a esta vía, amable, de dificultad escasa y mínimo riesgo.
De la ruta explicaré poco: La via empieza en un resalte rocoso de roca muy erosionada, para salir al camino de bajada. Lo cruzamos y continuamos por unas placas tumbadas bastante lisas donde la adherencia y por tanto con confianza en los gatos manda, hasta que las placas se acaban y empieza la vegetación.
Justo ahí empieza un sendero que rápidamente nos conducirá al camino que divide la ruta en dos, hasta llevarnos al camino principal que nos deja en el Coll Roig donde tenemos el coche.
De material con diez bagas exprés más reunión tendremos más que suficiente.
La via es lo que es...y como todas o casi todas hace su función. A mi en este caso me ha ido bien, porque me ha permitido estirar un poco los brazos sobre todo en un entorno de naturaleza exuberante que sólo por estar allí ya vale la pena.
Aqui cuelgo unas fotos de la via, y reseña muy bien creada por Joan Asin.
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